El domingo 11 de octubre Madrid se vistió de colores para recibir la tercera edición del "Vivamérica", un evento pensado para exponer las ideas de la intelectualidad latinoamericana sobre los temas que acucian al mundo contemporaneo; a la vez que brindaba la oportunidad para un encuentro masivo de las gentes provenientes de todos los países iberoamericanos con la sociedad madrileña por medio de su música y sus bailes.
La Asociación Acentos, en cumplimiento de su responsabilidad de dirigir la Comisión de Festejos de la Comunidad de Peruanos en Madrid (CFCPM), se propuso el objetivo de coadyuvar a la delegación de bailarines del bloque del Perú. Para ello hicimos una convocatoria de voluntarios a través de la (CFCPM), a la cual acudieron voluntarios experimentados de eventos anteriores y voluntarios nuevos.
La CFCPM dispuso la construcción de banderitas de papel, la adquisición de globos, donados por los auspiciadores y de caramelos para repartir entre el público. También mandó a confeccionar una bandera de grandes dimensiones para ser portada en la cabecera de la delegación. Todo ello con el aporte de los voluntarios, los auspiciadores y los fondos propios obtenidos en diversas actividades.
Las coordinaciones se hicieron directamente con cada una de las partes implicadas: con los organizadores del "Vivamérica", con "Voluntarios por Madrid" y con la parte artística de la delegación que se organizó de manera autónoma. La labor de la CFCPM, aparte de la tarea de acompañamiento y animación, consistió en garantizar el órden y la seguridad durante el pasacalle.
El avituallamiento de nuestros voluntarios tuvo que ser cubierto por nosotros mismos, ya que ninguna de las entidades responsables previó este aspecto.
Nuestro grupo de voluntarios se concentró inicialmente en la explanada del museo Reina Sofía para evitar los agobios de la aglomeración que se dió en la Cuesta de Moyano. Fué una decisión acertada porque permitió una buena coordinación previa y la ejecución de algunas labores como el llenado de una ficha, exigida por "Voluntarios por Madrid, para el seguro contra accidentes, o algunas tareas de último minuto.
Los voluntarios acudieron uniformados con una camiseta roja, una credencial y un chaleco de color naranja con franjas reflectantes.
El pasacalle estuvo bastante concurrido. El público disfrutó mucho y entre los rasgos se pudo ver una miscelanea de gentes provenientes de los más variados países, en un sólo grupo con la población de acogida.
La marcha del Vivamérica merece ser incorporada como una de las fiestas de Madrid ya que bien puede considerarse un espacio para la expresión cultural de una población que ha empezado a echar raíces aquí y que quiere mostrar lo mejor de sí.
*Fotos:
Helene Gutierrez Ampudia
Alberto kok Jaramillo
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